EL PAIS
30 marzo
2022
Por
qué las manos delatan la edad y hasta dónde ha llegado la cosmética para
impedirlo
Hay menos demanda que para otras partes
del cuerpo, pero la medicina y la cirugía estética también se ocupan de las
manos. Lo más importante, aun así, es la prevención.
Como bien sabía Fedora, la protagonista de aquella
inolvidable película de Billy Wilder, quien jamás se exponía al escrutinio
público sin unos guantes de diva puestos,
las manos delatan la edad como casi ninguna otra parte del cuerpo puede
hacer. Sin embargo, son grandes olvidados y muchas veces complicadas de tratar.
Al igual que en imágenes creadas por Inteligencia Artificial las manos de las
personas “fotografiadas” son las que delatan el artificio (suele
haber dedos de más y posiciones anatómicamente imposibles), muchas veces
nuestras caras y nuestras manos dicen cosas distintas sobre la edad que
tenemos. Limpiezas, tónicos, sérums, fotoprotectores,
cremas hidratantes… La cara es la que se lleva casi todos los esfuerzos
de cuidado de la piel, mientras que las manos, expuestas también al sol y en
contacto frecuente con agentes irritantes como los productos de limpieza,
tienen suerte si nos acordamos de aplicarles de vez en cuando alguna crema
hidratante.
“Lo que pasa es que se nos olvidan, no es lo primero
que nos vemos y se nos olvida”, explica la Ruth García, médico estético y
vocal de la Sociedad Española de Medicina Estética (SEME). El paso del tiempo
deja su huella en las manos en forma sobre todo de manchas solares en la piel y
de una pérdida de turgencia. “Se suelen marcar los tendones, los huesos,
la mano se esqueletiza”, indica la cirujana plástica Concepción Lorca,
vocal de Comunicación de la Sociedad Española de Cirugía Plástica, Reparadora y
Estética (SECPRE).
Sabemos de sobra que quien no se sienta a gusto con cómo van
envejeciendo su cara y su cuerpo puede desembolsar una cantidad determinada de
euros, someterse a todo tipo de tratamientos estéticos e incluso pasar por
quirófano, pero ¿hay algo también para las manos? “A la hora de tratar
las manos, los tratamientos estéticos son los mismos que hacemos en el resto
del cuerpo y de la cara”, señala Ruth García. “Las manchas se
pueden corregir con peelings, con IPL intensas y con láseres. Y luego podemos
nutrir esa piel con mesoterapia, es decir, inyecciones muy superficiales de
vitaminas, minerales, ácido hialurónico…”, indica. Todo esto son
técnicas de medicina estética que se realizan en consulta y que no requieren
pasar por quirófano.
Devolver volumen a la mano
El otro tema, el de la esqueletización,
se puede solucionar también en consulta mediante rellenos con ácido hialurónico
y otros estimulantes de colágeno. “Lo que conseguimos es aumentar un
poquito el volumen y a la vez estimular para que se fabrique colágeno propio”,
explica la vocal de la SEME. Para esta cuestión, además, existe también una
cirugía: se trata también de un relleno, pero con grasa propia.
“El relleno de manos con grasa propia sí es un
procedimiento quirúrgico”, explica Concepción Lorca. Al igual que los
rellenos con estimulantes de colágeno, su objetivo es recuperar ese volumen
perdido. “Se hace una liposucción pequeñita en una zona donde la paciente
tenga algún acúmulo, se procesa la grasa y se infiltra con cánulas muy finitas
en el dorso de la mano”, expone la cirujana. “La ventaja de este
tratamiento es que es más definitivo; los otros rellenos se acaban
reabsorbiendo y hay que ir poniendo más con el tiempo, duran unos cuatro o seis
meses”, explica.
En cuanto a qué técnica es más recomendable para dar volumen
a las manos, la cirujana indica que depende, en primer lugar, de si la paciente
tiene o no zona donante para poder hacer el relleno de grasa propia. “Si
está muy delgada, hay que ir directamente al ácido hialurónico”, indica.
Si puede optar a ambas técnicas, suele depender de la preferencia de cada
persona. “Hay quien no quiere entrar en quirófano y prefiere el
tratamiento en consulta, aunque tenga que repetírselo. El efecto que se
consigue es bastante similar, solo que uno se reabsorbe y se va y el otro es
más duradero”, explica. El procedimiento es rápido (unos 40 minutos) y se
hace en una única sesión. “Como en toda cirugía”, puede haber
riesgo de infección o hematoma, pero la cirujana indica que es raro que ocurra.
Además, “no suele ser muy doloroso ni tiene complicaciones
importantes”, indica. Un análisis de más de cuarenta estudios sobre las
principales técnicas de rejuvenecimiento de manos publicado en 2021 en Archives
of Aesthetic Plastic Surgery le da la razón.
Para rellenos no quirúrgicos, además del ácido hialurónico,
hay otros estimulantes de colágeno como la policaprolactona
o la hidroxiapatita cálcica. ¿Cuándo uno y cuándo otro? Ruth García, de la
SEME, explica que el hialurónico tiene una ventaja sobre el resto: hay una
hialuronidasa, es decir, una enzima que descompone el hialurónico y que se
puede utilizar en casos de excesos o complicaciones. Al margen de esto, suele
depender de la preferencia y experiencia de uso de cada médico estético.
“Cada maestrillo tiene su librillo”, indica García. “Los
estimulantes de colágeno son todo un mundo, pero el mecanismo de acción, aunque
sean diferentes partículas, es muy similar”, señala.
Para las venas muy visibles, además, existe también la
escleroterapia, un procedimiento quirúrgico que consiste en inyectar una
solución en la vena que hace que esta cicatrice y acabe desapareciendo (la
sangre se encamina por otras venas), pero Concepción Lorca, en principio, no lo
recomienda, ya que con los rellenos se consigue también que las venas se vean
menos.
¿Son más difíciles todos estos procedimientos estéticos en
la mano que en otras zonas del cuerpo como la cara? Concepción Lorca cree que
no, siempre que el procedimiento o la cirugía te lo realice un médico
especializado. “Hay que conocer la anatomía y saber dónde
infiltrar”, indica.
Casi siempre mujeres
En las salas de espera de las clínicas de medicina y cirugía
estética no suele haber demasiadas personas que acudan con la intención de
tratar las manos, algo que Concepción Lorca atribuye a que, por un lado, no es
una posibilidad que muchas personas conozcan y, por otro, a que “las
manos no es algo a lo que le demos tanta importancia como a la cara”. En
cuanto al perfil del paciente que sí busca rejuvenecer sus manos, suelen ser
personas de a partir de 50 o 55 años, casi siempre mujeres, que tienden además
a ser delgadas, lo que obliga en el caso de los rellenos a recurrir al ácido
hialurónico.
Por su parte, Ruth García indica que, aunque en los últimos
años los hombres ya han entrado en todo en la medicina estética, en manos
todavía no ha tenido ningún caso, posiblemente porque en general de momento es
algo con poca demanda. Lo que sí ha tenido es algún caso de alguna paciente
algo más joven, que por genética ya a los cuarenta y algo tenía las manos
“muy esqueletizadas”. De todas formas, explica que lo habitual es
que los primeros tratamientos que se hagan en las manos sean por alguna mancha
o para darles luminosidad; los rellenos suelen llegar más adelante.
Como en todo tratamiento médico, es importante revisar bien
la historia clínica en cada caso por si existiese alguna contraindicación,
insiste Ruth García, además de hablar con los pacientes para “acordar las
expectativas, que tengan claro qué podemos conseguir y qué no”. Como en
el resto de los tratamientos de medicina estética, no se trata tanto de
intentar parecer que tienes 20 años si tienes 50, sino de tener “buen
aspecto, pero dentro de tu edad”, reflexiona la doctora. “Que
tengas sensación de sano, que te veas bien. Eso al final también es
salud”, añade.
Antes de llegar a todo esto, sin embargo, lo más básico es
la prevención, coinciden todas las expertas. “Las manos delatan la edad,
hay que cuidarlas y básicamente protegerlas del sol y aplicarles mucha
hidratación. Pienso que eso es lo más importante para que unas manos parezcan
jóvenes, que no haya manchas y que no estén resecas”, indica Isabel
Moreno, presidenta de la Asociación Española de Cirugía Estética Plástica
(AECEP). Por último, a quien quiera realizarse cualquiera de estos tratamientos
para rejuvenecer el aspecto de las manos, recomienda elegir bien dónde se hace.
“Como decimos siempre, realizado por profesiones competentes y formados,
no hay ningún riesgo”, señala.