EUROPA
PRESS
22 enero
2024
Estas
son las 5 principales hormonas de nuestro cuerpo
Sin hormonas no podemos vivir. Son
nuestras mensajeras biológicas. Recorren todo nuestro cuerpo informando a
nuestras células y órganos sobre lo que deben hacer. Y por ejemplo nos ayudan a
crecer, a reproducirnos, regulan el metabolismo, entre otras numerosísimas
funciones. Vamos a conocerlas un poco mejor.
Para ello entrevistamos en Infosalus
a la doctora Carolina Perdomo, especialista en Endocrinología y Nutrición de la
Clínica Universidad de Navarra, quien destaca que las hormonas son
"mensajeros químicos entre el órgano que las secreta y las células
receptoras", y una manera en la que el cuerpo logra la comunicación entre
células.
"Realmente las hormonas nos permiten vivir. No sólo nos
sirven para el crecimiento, sino también para el desarrollo, para regular los
ciclos de sueño, el estado de ánimo, el apetito, para la función sexual y la
reproducción. También se relacionan con el estado anímico, con el metabolismo
energético, con el de los hidratos de carbono, o con el lipídico. Son
necesarias e importantes para nuestro desarrollo diario, y cuando falta una
hormona se desarrolla una patología y es importante tratarlo", aclara.
Así, precisa que son muchas las hormonas conocidas, y aún a
día de hoy se siguen identificando hormonas, siendo la
hipófisis es el director de la orquesta hormonal, aunque no todas las hormonas
se secretan ahí. "El sistema endocrino está formado por distintas
glándulas endocrinas que producen hormonas, como la hipófisis, la tiroides, el
timo, el páncreas, los ovarios, o los testículos entre otras", aclara.
Recuerda en este punto que el ser humano ya nace con
hormonas, concretamente se empiezan a secretar a partir de la semana 9 de
gestación, pero depende del tipo de hormona, porque algunas se secretan de
forma más tardía. "Sí nacemos con hormonas, y las mismas hormonas maternas
pueden atravesar la barrera placentaria y también podrían influir sobre el
feto", agrega.
Cuando hay un trastorno
Desde la Sociedad Americana de Endocrinología destacan que
existen muchas hormonas diferentes en el cuerpo humano y que todas ellas son
"potentes", de manera que una leve alteración en una de ellas puede
representar un cambio en las células o en el propio organismo, debiendo
analizarse en el laboratorio, a través de una analítica de sangre,
habitualmente.
"Cumplen un papel esencial en los procesos químicos de
nuestro organismo al transmitir mensajes entre las células y los órganos.
Cuando alcanzan el equilibrio adecuado ayudan al organismo a desarrollarse
sanamente pero, a veces, los desequilibrios hormonales, que pueden ocurrir en
cualquier momento, pueden causar problemas de salud graves que requieren
tratamiento médico grave, independientemente de la edad de la persona",
mantiene.
Así, la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición
subraya que las enfermedades endocrinas son producidas por niveles bajos, o
altos, de hormonas, siendo las más frecuentes: obesidad, diabetes,
hipertensión, infertilidad, enfermedades tiroideas, cáncer, trastornos del
crecimiento y del desarrollo, osteoporosis, disfunción sexual, entre otras.
Las principales 5 hormonas y para qué sirven
Con ello, la especialista en Endocrinología y Nutrición de
la Clínica Universidad de Navarra destaca las 5 hormonas más importantes para
el correcto funcionamiento del organismo:
1.
Cortisol: la gasolina del cuerpo, fundamental para la vida,
tiene un ciclo circadiano, es decir, cuenta con una producción mayoritaria en
un momento puntual del día (suele ser por la mañana), y nos permite levantarnos
y estar activos por el día, nos da energía y fuerza la mañana), y nos permite
levantarnos y estar activos por el día, nos da energía y fuerza física para
poder desempeñar nuestras actividades diarias.
2.
La hormona tiroidea: es la batería del cuerpo, fundamental
para el metabolismo humano, y gracias a ella el metabolismo celular de muchos
órganos se puede ver perjudicada en caso de tener un déficit de esta hormona.
3.
Insulina: secretada por el sistema endocrino del páncreas, y
gracias a ella podemos obtener glucosa en algunas células y poder así ejercer
el metabolismo de los hidratos de carbono; si no fuera por ella tendríamos
diabetes; supone el combustible de muchas células y mecanismos bioquímicos y
moleculares.
4.
Las hormonas sexuales: sobre todo en el hombre la
testosterona y en la mujer los estrógenos, porque nos ayudan en función sexual,
para estado animico, para el fortalecimiento
muscular, gracias a ella hay un mejor metabolismo de hidratos de carbono y de
lípidos, y cuando tenemos ausencia de ellas en la andropausia en el hombre o de
la menopausia con la mujer hay muchos cuadros clínicos caracterizados por
alteración de la menopausia con la mujer hay muchos cuadros clínicos
caracterizados por alteración de la glucosa, colesterol, ganancia de peso o
cansancio físico.
5.
Paratohormona: se libera en las glándulas
paratiroideas, cercanas a la tiroides, son cuatro, y muchas veces se altera su
función y al secretarse demasiado puede desembocar en alteraciones en el metabolismo
del calcio, cuando éste es fundamental para los huesos, y también como cofactor
para las reacciones enzimáticas fundamentales para la vida, como a contracción
cardíaca, de forma que sin el calcio no puede haber una relajación del
miocardio, por ejemplo.
Los transportadores de hormonas
A juicio de la doctora Carolina Perdomo, además, algo
importante que suele desconocerse es que existen transportadores de hormonas:
"Podríamos tener una producción normal de hormonas, pero si estos
transportadores están bajos o muy altos podríamos tener una alteración en la
actuación de esas hormonas".
Por ejemplo, cita que la desnutrición o la obesidad pueden
alterarnos las proteínas transportadoras de las hormonas, y esto tendrá
consecuencias en el sistema hormonal: "En el día a día vemos casos que más
que tratar y dar hormonas sintéticas al paciente, igual conviene modificar el
problema subyacente para permitirle tener un adecuado número de proteínas
transportadoras. Hay diferentes opciones terapéuticas para modificarlas, y por
ejemplo en el caso de la obesidad la pérdida ponderal nos permite mejorar la
función hormonal de esta manera".