EL
MUNDO
18 abril
2023
Una
investigación revela que el 'olor' de las feromonas femeninas adelgaza y
aumenta la esperanza de vida
Gema García Marcos
Un equipo de la Universidad de Otago ha
constado la alucinante influencia del aroma corporal femenino en el metabolismo
masculino con un experimento llevado a cabo con ratones.
Hasta ahora, probablemente, ya habíamos experimentado en
nuestras propias. carnes (sobre todo, cuando éramos
más jóvenes) cómo comer delante de la persona que nos gusta, puede ayudarnos a
adelgazar porque, como se suele decir coloquialmente, los nervios 'nos cierran
el estómago'. También se había contado por ahí que, según una investigación
publicada en 'Journal of Marketing Research', oler la comida durante un mínimo de dos minutos
antes de abalanzarnos sobre ella hace que lo hagamos sin tanta ansiedad y que
comamos con más mesura (teoría que explicaría, también, por qué apenas tenemos
hambre después de cocinar nosotros mismos lo que vamos a comer).
Pues bien, ahora, un equipo de expertos de la Universidad de
Otago (Nueva Zelanda) acaba de ir varios pasos más allá con una investigación,
publicada el 20 de marzo de 2023, en la que se revela, nada más y nada menos,
que la exposición a los olores y feromonas femeninas provoca la pérdida de peso
y prolonga la vida de los ratones, un descubrimiento
alucinante que también podría tener implicaciones para los seres humanos.
Aunque, obviamente, no somos conscientes de ello en nuestra
vida cotidiana, los estímulos olfativos de los alimentos influyen en el
equilibrio energético de nuestro organismo, preparándolo para llevar a cabo la
digestión cuando se consumen los alimentos (de ahí lo de olfatear más de dos
minutos antes de 'zampar'). Porque en esta maquinaria tan perfecta que es el
cuerpo humano, tanto el sistema gustativo como el olfativo tiene la capacidad
de transformar las señales químicosensoriales que
reciben del exterior en percepciones que, inevitablemente, influyen en lo que
nos acontece, en este caso, durante la transformación de la comida en energía.
Pues bien, según todo esto, el equipo de investigación
liderado por el doctor Michael Garratt, del
Departamento de Anatomía, ha conseguido evidenciar que la exposición a
estímulos químicosensoriales femeninos (tanto olor
corporal como feromonas) aumenta la tasa metabólica en ratones machos,
reduciendo el peso corporal y la expansión del tejido adiposo incluso cuando
estos reciben una dieta rica en grasas.
El propio Garratt ha declarado
que, si bien ya se sabía que las señales sensoriales en humanos y animales
influyen en la liberación de hormonas sexuales, su estudio evidencia que éstas
podrían tener efectos fisiológicos más generalizados sobre el metabolismo y el
envejecimiento. "Nuestro estudio muestra que los olores de las hembras
ralentizan el desarrollo sexual de los ratones de su mismo sexo, prolongando,
en consecuencia, su vida útil. También, que el mero olor de las hembras puede
aumentar el gasto de energía de los ratones machos, lo que posteriormente
influye en su peso y su porcentaje de grasa corporal".
Curiosamente, al realizar el experimento al revés
(exponiendo a las hembras al aroma de los machos o los machos al suyo propio)
no se produjo ninguno de los efectos antes señalados.
"Hasta donde sabemos, esta es la primera observación de
que la esperanza de vida puede aumentar en un mamífero mediante señales
olfativas o, de hecho, factores secretados que se encuentran en la ropa de cama
sucia y la orina", ha manifestado Garratt. Lo
cierto es que el tema es alucinante.