EUROPA
PRESS
4 mayo
2023
Consiguen
ralentizar el envejecimiento de las células
Los investigadores han desarrollado un
"reloj" biosintético que impide que las células alcancen los niveles
normales de deterioro relacionados con el envejecimiento. Se trata de un
oscilador génico que alterna entre las dos vías normales del envejecimiento,
ralentizando la degeneración celular y estableciendo un récord de prolongación
de la vida, según publican en la revista 'Science'.
La esperanza de vida humana está relacionada con el
envejecimiento de nuestras células individuales. Hace tres años, un grupo de
investigadores de la Universidad de California en San Diego (Estados Unidos)
descifró los mecanismos esenciales que subyacen al proceso de envejecimiento.
Tras identificar dos direcciones distintas que siguen las células durante el
envejecimiento, los investigadores manipularon genéticamente estos procesos
para prolongar la vida útil de las células.
Ahora este equipo ha ampliado esta investigación utilizando
la biología sintética para diseñar una solución que impide que las células
alcancen los niveles normales de deterioro asociados al envejecimiento. Todas
las células, incluidas las de levaduras, plantas, animales y seres humanos,
contienen circuitos reguladores de genes que son responsables de muchas
funciones fisiológicas, incluido el envejecimiento.
"Estos circuitos genéticos pueden funcionar como
nuestros circuitos eléctricos domésticos que controlan aparatos como
electrodomésticos y automóviles", afirma el profesor Nan Hao, del
Departamento de Biología Molecular de la Facultad de Ciencias Biológicas, autor
principal del estudio y codirector del Instituto de Biología Sintética de la UC
San Diego.
Sin embargo, el grupo de la UC San Diego descubrió que, bajo
el control de un circuito central de regulación genética, las células no
envejecen necesariamente de la misma manera. "Imaginemos un coche que
envejece a medida que se deteriora el motor o se desgasta la transmisión, pero
no ambas cosas a la vez", señala el equipo de la UC de San Diego, que
imaginó un "proceso de envejecimiento inteligente" que prolonga la
longevidad celular alternando el deterioro de un mecanismo de envejecimiento a
otro.
En el nuevo estudio, los investigadores modificaron
genéticamente el circuito que controla el envejecimiento celular. En lugar de
funcionar normalmente como un interruptor de palanca, crearon un circuito de
retroalimentación negativa para detener el proceso de envejecimiento.
El circuito recableado funciona como un dispositivo similar
a un reloj, denominado oscilador génico, que impulsa a la célula a alternar
periódicamente entre dos estados "envejecidos" perjudiciales,
evitando la permanencia prolongada en cualquiera de ellos y ralentizando así la
degeneración celular.
Estos avances permitieron prolongar espectacularmente la
vida celular, estableciendo un nuevo récord de prolongación de la vida mediante
intervenciones genéticas y químicas.
Como suelen hacer los ingenieros eléctricos, los
investigadores de este estudio utilizaron primero simulaciones por ordenador
del funcionamiento del circuito central del envejecimiento. Esto les ayudó a
diseñar y probar ideas antes de construir o modificar el circuito en la célula.
Este planteamiento tiene la ventaja de ahorrar tiempo y recursos para
identificar estrategias eficaces a favor de la longevidad, en comparación con
las estrategias genéticas más tradicionales.
"Es la primera vez que se utilizan principios de ingeniería
y biología sintética guiados computacionalmente para rediseñar racionalmente
circuitos genéticos y reprogramar el proceso de envejecimiento para promover
eficazmente la longevidad", afirma Hao.
Hace varios años, el equipo de investigación multidisciplinar
de la UC San Diego empezó a estudiar los mecanismos que subyacen al
envejecimiento celular, un complejo proceso biológico que subyace a la
longevidad humana y a muchas enfermedades.
Descubrieron que las células siguen una cascada de cambios
moleculares a lo largo de toda su vida hasta que acaban degenerando y muriendo,
pero observaron que células del mismo material genético y dentro del mismo
entorno pueden recorrer rutas de envejecimiento distintas.
Aproximadamente la mitad de las células envejecen a través
de una disminución gradual de la estabilidad del ADN, donde se almacena la
información genética. La otra mitad envejece por un camino ligado al declive de
las mitocondrias, las unidades de producción de energía de las células.
El nuevo logro de la biología sintética tiene el potencial
de reconfigurar los enfoques científicos del retraso del envejecimiento.
A diferencia de los numerosos intentos químicos y genéticos
de forzar a las células a estados artificiales de "juventud", la
nueva investigación demuestra que es posible ralentizar el tictac del reloj del
envejecimiento impidiendo activamente que las células se comprometan con una
trayectoria predestinada de declive y muerte, y los osciladores génicos en forma de reloj podrían ser un sistema universal
para lograrlo.
"Nuestros resultados establecen una conexión entre la
arquitectura de la red génica y la longevidad celular que podría conducir a
circuitos génicos diseñados racionalmente para ralentizar el
envejecimiento", señalan los investigadores en su estudio.
Durante su investigación, el equipo estudió células de
levadura 'Saccharomyces cerevisiae'
como modelo del envejecimiento de las células humanas. Desarrollaron y
emplearon microfluidos y microscopía 'time-lapse'
para seguir los procesos de envejecimiento a lo largo de la vida de la célula.
En el estudio actual, las células de levadura que se recablearon sintéticamente y envejecieron bajo la dirección
del dispositivo oscilador sintético dieron lugar a un aumento del 82% de la
vida útil en comparación con las células de control que envejecieron en
circunstancias normales. Los resultados revelaron "la prolongación de la
vida útil más pronunciada en levaduras que hemos observado con perturbaciones
genéticas", señalan.
"Nuestras células osciladoras viven más tiempo que
cualquiera de las cepas más longevas identificadas previamente mediante cribas
genéticas no sesgadas", añade Hao.
"Nuestro trabajo representa un ejemplo de prueba de
concepto, que demuestra la aplicación con éxito de la biología sintética para
reprogramar el proceso de envejecimiento celular con éxito de la biología
sintética para reprogramar el proceso de envejecimiento celular --escriben los
autores--, y puede sentar las bases para diseñar circuitos genéticos sintéticos
que promuevan eficazmente la longevidad en organismos más complejos".
El equipo está ampliando actualmente su investigación al
envejecimiento de diversos tipos de células humanas, incluidas células madre y
neuronas.