EUROPA
PRESS
16 marzo
2024
La
dieta de 5 días que imita al ayuno y reduce los riesgos de enfermedad y la edad
biológica
Los ciclos de una dieta que imita el
ayuno pueden reducir los signos de envejecimiento del sistema inmunitario, así
como la resistencia a la insulina y la grasa hepática en humanos, lo que se
traduce en una edad biológica más baja, según un nuevo estudio dirigido por la
Facultad de Gerontología Leonard Davis de la Universidad de Sur de California
(USC), en Estados Unidos.
El estudio, publicado en la revista 'Nature
Communications', se suma al conjunto de pruebas que respaldan los efectos
beneficiosos de la dieta que imita el ayuno (FMD, por sus siglas en inglés).
Se trata de una dieta de cinco días rica en grasas
insaturadas y baja en calorías, proteínas e hidratos de carbono. Está diseñada
para imitar los efectos de un ayuno de sólo agua, al tiempo que proporciona los
nutrientes necesarios y facilita que las personas completen el ayuno.
"Se trata del primer estudio que demuestra que una
intervención basada en alimentos que no requiere cambios crónicos en la dieta
ni en el estilo de vida puede rejuvenecer biológicamente a las personas,
basándose tanto en los cambios en los factores de riesgo de envejecimiento y
enfermedad como en un método validado desarrollado por el grupo de Levine para
evaluar la edad biológica", explica el profesor de la Escuela Leonard
Davis de la USC Valter Longo, autor de la dieta.
Investigaciones anteriores dirigidas por Longo han indicado
que los ciclos breves y periódicos de fiebre aftosa se asocian a una serie de
efectos beneficiosos: pueden promover la regeneración de células madre,
disminuir los efectos secundarios de la quimioterapia y reducir los signos de
demencia en ratones. Además, los ciclos de FMD pueden reducir los factores de
riesgo de cáncer, diabetes, cardiopatías y otras enfermedades relacionadas con
la edad en humanos.
El laboratorio Longo también había demostrado anteriormente
que uno o dos ciclos de la FMD durante cinco días al mes aumentaban la duración
de la salud y la esperanza de vida de ratones con una dieta normal u
occidental, pero hasta ahora se desconocían los efectos de esta dieta sobre el
envejecimiento y la edad biológica, la grasa hepática y el envejecimiento del
sistema inmunitario en humanos.
El estudio analizó los efectos de la dieta en dos
poblaciones de ensayo clínico, cada una con hombres y mujeres de entre 18 y 70
años. Los pacientes asignados aleatoriamente a la dieta que imita el ayuno se
sometieron a 3 ó 4 ciclos mensuales, siguiendo la FMD durante 5 días, y después
siguieron una dieta normal durante 25 días.
La FMD se compone de sopas vegetales, barritas energéticas,
bebidas energéticas, aperitivos de patatas fritas y té en porciones durante 5
días, así como de un suplemento que proporciona altos niveles de minerales,
vitaminas y ácidos grasos esenciales. A los pacientes de los grupos de control
se les indicó que siguieran una dieta normal o mediterránea.
Un análisis de las muestras de sangre de los participantes
en el ensayo mostró que los pacientes del grupo de la FMD presentaban factores
de riesgo de diabetes más bajos, incluida una menor resistencia a la insulina y
resultados más bajos de HbA1c.
Las imágenes de resonancia magnética también revelaron una
disminución de la grasa abdominal, así como de la grasa dentro del hígado,
mejoras asociadas a un menor riesgo de síndrome metabólico. Además, los ciclos
de FMD parecían aumentar la proporción entre linfoides y mieloides, un
indicador de un sistema inmunitario más joven.
Otros análisis estadísticos de los resultados de ambos
estudios clínicos mostraron que los participantes en la FMD habían reducido su
edad biológica -una medida del funcionamiento de las células y tejidos de una
persona, en contraposición a la edad cronológica- en 2,5 años de media.
"Este estudio muestra por primera vez pruebas de
reducción de la edad biológica a partir de dos ensayos clínicos diferentes,
acompañadas de indicios de rejuvenecimiento de la función metabólica e
inmunitaria", resalta Longo.
El estudio, dirigido por los primeros autores Sebastian Brandhorst, profesor asociado de investigación de la USC
Leonard Davis, y Morgan E. Levine, investigadora principal fundadora de Altos
Labs y ex alumna de doctorado de la USC Leonard Davis, presta más apoyo al
potencial de la FMD como intervención dietética periódica a corto plazo y
alcanzable que puede ayudar a las personas a disminuir su riesgo de enfermedad
y mejorar su salud sin grandes cambios en su estilo de vida, subraya Longo.
"Aunque muchos médicos ya recomiendan la FMD en Estados
Unidos y sanitarios a recomendar los ciclos de FMD a pacientes con niveles de
factores de riesgo de enfermedad superiores a los deseados, así como a la
población general que pueda estar interesada en aumentar su función y alcanzar
una edad más temprana", concluye.