EUROPA
PRESS
9 abril
2024
El
pelo propio es la elección más segura y natural para el trasplante capilar
El pelo del propio paciente es la
elección más natural y segura cuando se lleva a cabo un trasplante capilar, ya
que el cabello artificial tiene altas tasas de rechazo, según aseguran desde la
Unidad Capilar de Quirónsalud Vitoria.
Las doctoras Libe Aspe y Maribel Martínez, ambas expertas en
dermatología y tricología, lideran esta unidad capilar, que está especializada
en técnicas de diagnóstico y tratamiento médico capilar que incluye, entre
otros tratamientos, el trasplante capilar.
Pero antes de un trasplante, ambas especialistas coinciden
en que hay alternativas muy efectivas y con grandes resultados, como son los
tratamientos médicos tópicos, orales, mesoterapia capilar o plasma rico en
plaquetas, que ayudan e incluso revierten la caída del cabello en muchos casos.
Por ello, apuntan, que lo primero y más importante es realizar un diagnóstico
individualizado preciso que permita establecer el tratamiento más adecuado.
La alopecia androgénica, el tipo de alopecia más común,
afecta con distintos grados de intensidad, a 9 de cada 10 hombres con más de 21
años. En el caso de las mujeres suele ocurrir después de la menopausia y afecta
a menos de la mitad, 4 de cada 10.
"Cerca del 70 por ciento de los pacientes son hombres,
pero la calvicie no solo afecta a varones, cada vez hay más mujeres que acuden
a consulta, sobre todo por pérdida de densidad o caída excesiva", ha
afirmado Aspe.
Asimismo, el trasplante capilar en mujeres "ha dejado
de ser un tabú", puntualiza Martínez, quien añade que "acuden a
consulta especialmente por la pérdida de cabello que acontece con la
menopausia".
Técnica F.U.E.
En el centro hospitalario realizan la técnica F.U.E
(Extracción de Unidad Folicular), con la que extraen "unidades
foliculares, una a una, de la zona que conserva pelo y las colocamos en la zona
receptora donde interesa repoblar", ha explicado Aspe.
Para lograr naturalidad se realiza un análisis previo y un
diseño para determinar cómo se van a colocar los folículos y conseguir así
imitar la naturalidad del pelo y evitar el efecto pelo de muñeca. Además,
"no requiere puntos de sutura, no deja cicatriz lineal visible, ni apenas
ocasiona molestias en el proceso de cicatrización", ha asegurado las
especialistas.
Según señalan, se trata de una cirugía mínimamente invasiva
ambulatoria, es decir, no quiere hospitalización y se puede realizar con
anestesia local o sedación, dependiendo de la necesidad del paciente. Además, el
seguimiento se realiza cerca de casa para evitar molestias e incomodidades.
Por último, las especialistas han afirmado que el
postoperatorio del trasplante capilar es "llevadero y apenas
doloroso", aunque "hay que guardar unos días de reposo con los que
tener cuidado de no tocar la zona trasplantada, con roces de ropa, al dormir,
entrar y salir del coche, etc.".